¿Qué hacer cuando tu pareja te deja?

¿Te ha dejado tu pareja y era algo que no te esperabas?

Si tu pareja te deja sin que tú te lo esperes, es probable que en estos momentos estés en shock.

Claro que si la relación iba mal desde hace tiempo…
quizá sabías que teníais problemas,
pero de ahí a dejar la relación…
¡eso son palabras mayores!

Sea como sea, encajar esa nueva realidad va a significar pasar por un duelo.

Un proceso de pérdida que llevará asociadas una serie de emociones dolorosas,
ya que la persona a la que quieres ha decidido seguir su vida sin ti.

En este artículo me propongo orientarte en algunas cosas que puedes hacer para que,
a pesar del dolor que puedas sentir si tu pareja te deja,
pasar por el proceso de la mejor manera posible.

¿Por qué me deja?

Hace años tuve una relación que la recuerdo más por lo que me costó superar que por lo que la relación fue en sí.

Te explico por qué.

Llevábamos 3 meses.
Desde mi punto de vista todo iba bien.

Es verdad que vivíamos a 1 hora el uno del otro, pero yo subía a su ciudad cada fin de semana ya que trabajaba allí.

Un día me llama mi entonces novio y simplemente me dice:
“No quiero seguir con la relación”

Y me colgó.

Así. Sin más.
Sin explicaciones.
Sin motivos.

Claro, yo lo llamé de vuelta
pero ya no me volvió a coger el teléfono.
Ni ese día.
Ni al día siguiente.
Ni al mes siguiente.
Ni al año siguiente.

Yo no entendí nada.
Y precisamente por eso,
me fue difícil aceptarlo,
ya que yo quería una respuesta
algo que me ayudara a comprender sus motivos.

También me encuentro en sesiones que,
cuando la persona no entiende los verdaderos motivos por los que es dejada,
le cuesta mucho más superar esa ruptura.

Si no tienes claro los motivos por los que tu ex-pareja te ha dejado,
te recomiendo que hables con ella para poder aclarar tus dudas.

Tú podrás estar de acuerdo o no con sus motivos.
Quizá para ti no sean suficientes para dejar la relación,
pero son sus motivos
y no puedes obligar a nadie a estar contigo.

Aunque duela, si no quiere o no valora el estar a tu lado, es mejor que se vaya.
Y cuanto antes, mejor.

¿Para qué continuar con una relación en la que uno de los dos no quiere continuar?
¿Para dejarlo más tarde?

No tiene sentido.

Eso solo alarga la agonía.

Otra tema es cuando tu ex-pareja tiene dudas
respecto a si dejar o no la relación,
en ese caso,
sí que se puede plantear otro tipo de conversación
en la que ambos habléis de lo que cada uno necesita
para seguir apostando por la relación.

Quizá puede ser un buen momento para hacer terapia de pareja y que pueda guiaros un poco en el camino.

Pero este post trata de cuando tu pareja ya ha tomado la decisión y,
por lo que parece,
al menos de momento,
no hay vuelta atrás.

En ese momento vas a tener que ACEPTAR que vas a pasar por varias fases.

Fase Emocional

En esta fase vas a experimentar muchas emociones,
pero una de las principales será la tristeza
por el dolor de la pérdida.

• Que te dejen, duele.
• Que tu proyección del futuro ya no sea como la imaginabas, duele.
• Que la otra persona haya decidido irse, en vez de luchar por la relación, duele.

Y, si encima, no te lo esperabas, pues aún duele más.

Cuando ya has llorado bastante, es posible que pases a una emoción de rabia.

• ¿Cómo ha podido hacerme esto a mí?
• ¿Quién se ha creído que es?
• No se lo perdonaré nunca…

La rabia se mezcla con la impotencia de desear que las cosas fueran diferentes de como son.

Y la impotencia te puede llevar a la apatía.

• Todo te da igual.
• Nada parece tener sentido.
• No consigues sentir ninguna emoción positiva por más que lo intentas.

Déjame decirte que todas estas emociones son normales.

¿Qué puede ayudarte en estos momentos?

Expresa tus emociones

• Si tienes que llorar, llora
• Si necesitas hablar con “monotema” (mi pareja me ha dejado), hazlo.
• Escribe para desahogarte

Vacíate, no te lo quedes dentro.

Esto es muy importante porque la ira contenida sólo puede hacerte daño a ti.
La tristeza no expresada puede llevarte a una depresión.
El miedo NO afrontado puede hacer que te aisles y no seas capaz de superarlo.

Pero si expresas tus emociones, te liberas de ellas.

Limita el tiempo

Está bien expresar todas tus emociones y
al principio,
yo te diría que no hay límite de tiempo.
Hazlo cuando te apetezca,
las veces que lo necesites:
llora,
habla,
escribe en cualquier momento del día.

Pero vas a tener que limitar estas expresiones de dolor para que no invadan tu día.

Si continúas las 24h llorando por todos los rincones o lamentándote,
las expresiones de dolor van a absorvert
y corres el riesgo de caer en una depresión.

Que te hayan dejado es doloroso, sí, pero NO es el fin del mundo.

Aunque ahora te lo parezca.

Así que decide en qué momento del día vas a “abrir la puerta” de tus emociones y las vas a dejar salir.

Eres tú quien ha de controlar tus emociones y no ellas a ti.

Fase de Negación-Confusión

Al principio no puedes creer lo que te está pasando.
Hay una parte de ti que todavía no se hace a la idea
de que ya no vas a estar más con tu pareja.

Tu cabeza se llena de dudas y preguntas en muchas direcciones:

• ¿qué pasará a partir de ahora?
• ¿dónde viviré? (en caso de que viviérais juntos)
• ¿qué nos ha pasado?
• ¿cómo no lo he visto venir?
• ¿seré capaz de vivir sin él/ella?
• ¿debería hacer algo para recuperar la relación?
• etc.

Y está bien que tu mente se cuestione tantas cosas,
porque lo desconocido asusta.

Es un cambio importante en tu vida y en la forma que,
a partir de esta ruptura
vas a vivirla.

Es lógico y natural que te sientas confundido/a.

Si entiendes que esta fase de confusión forma parte del proceso,
permitirás que fluya de otra manera.

¿Qué puede ayudarte en estos momentos?

Así como le has dado espacio a tus emociones,
también tienes que darle espacio a tus dudas.

Es normal que tengas muchas preguntas,
pero también es difícil darles una respuesta clara
en estos momentos.

Acepta lo que Es

No puedes cambiar lo que ha sucedido.

Y lo que te va a ayudar mucho es ACEPTAR las cosas tal y como están en este momento.

Aceptar también el dolor de que tu pareja te deje.
Porque cuando aceptas lo que hay,
dejas de luchar contra la situación
e incluso contra ti.

Y eso te permite relajarte internamente.

Aceptar no significa que te guste
ni que estés de acuerdo con lo que está pasando,
pero comprendes que te encuentras en una situación
que tú NO puedes cambiar.

Si aceptas lo que es,
liberas energía dedicada a la negación
para utilizarla en aspectos más prácticos
que te ayudarán a resolver tus dudas.

Practica el Mindfulness

El Mindfulness te ayuda a poner tu foco en el Ahora.

Pues es probable que tu mente esté constantemente saltando del pasado
(recordando momentos de vuestra relación)
al futuro
(imaginando posibles escenarios de reencuentro).

Con el Mindfulness aprendes a dirigir tu atención al Presente.
Para ello, te dejo aquí el enlace a mi minicurso gratuito de Mindfulness.

Practica la Respiración Abdominal

La respiración abdominal es aquella que consigue “bajar” el aire hasta la barriga.

Con las emociones a flor de piel,
es posible que,
si no prestas atención a la manera en la que respiras,
acabes respirando de manera superficial.

Si respiras mucho con el pecho
corres el riesgo de hiperventilar
(respiraciones cortas y rápidas
que hacen que entre más oxígeno en tu cuerpo
que del dióxido de carbono que sale)
y que tu cuerpo se desequilibre.

Incluso puedes llegar a tener ataques de ansiedad.

Así que ponte la alarma en el móvil si hace falta,
pero trata de practicar esta respiración.

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Fase de Reconstrucción

Podrás empezar con la fase de reconstrucción
en el momento en que ya tengas asimilada la ruptura
y tengas energía suficiente para empezar a buscar soluciones.

Esta fase no consiste sólo en reconstruir tu situación física o logística
(dónde vas a vivir, si tenéis que vender el piso, etc.)
sino también la emocional.

El corazón necesita su tiempo para recuperarse y tendrás que ser paciente contigo.

¿Qué te puede ayudar en esta fase?

Cuídate y respétate

Esto es importante siempre,
pero después de un proceso doloroso,
aún tienes que prestarte más atención
y mimarte más.

• Cultiva la relación contigo
• quiérete mucho
• háblate con cariño
• respeta tus necesidades

y también define qué tipo de personas quieres en tu vida y qué tipo de relaciones.

Busca personas que compartan tus valores, 
especialmente,
en un momento como el que estás pasando.

Y ponle un freno a aquellas que no van contigo,
con tu manera de pensar o ver la vida.

Porque después de una separación,
al estar más necesitada/o de cariño,
podrías “engancharte” a personas
que NO te convienen,
para “tapar” tu dolor.

No lo permitas,
porque a la larga,
te hará daño.

Empieza a pensar en las nuevas oportunidades que se abren ante ti.

Como dice el dicho popular, “cuando una puerta se cierra, muchas otras se abren”.

Es un momento de reflexionar,
de hacer balance
y ver qué es lo que quieres en tu vida,
a partir de ahora.

Piensa en ti.
Recoge la enseñanza de esta relación que se va.

Sé que puede serte difícil focalizarte en “el aprendizaje”
cuando estás super dolida o dolido porque tu pareja te ha dejado,
lo sé,
no hay prisa para realizar este paso,
pero has de darlo.

Trata de no compadecerte y controla tus pensamientos negativos.

Un pensamiento que puedes utilizar es:
“Si esto te ha pasado,
es por algún motivo que ahora desconoces,
pero todo pasa por un motivo
aunque ahora no puedas verlo”.

Tienes la libertad de elegir cómo quieres pensar y actuar en esta situación.

Así que elige pensamientos que te empoderen.

También es importante que trates de llevar contigo el aprendizaje
y lo pongas en práctica
en la próxima situación o relación que tengas.

Deja que entren en tu vida cosas y personas nuevas.

Esto es super importante y
aunque comprendo que te has de dar tu tiempo para empezar a hacer cosas nuevas,
empieza por cosas muuuuy pequeñas.

¿Qué es lo que te gusta?
¿Con qué solías o sueles disfrutar?
¿Te gusta bailar, pasear, algún deporte, pintar, ir a la playa, a la montaña…?

Recuerda qué cosas son aquellas que te gustaban y empieza a hacerlas,
incluso si al principio,
tienes que hacerlas sol@

Si te quedas en casa,
tu mente no suelta los pensamientos
y si sales y haces algo diferente,
durante ese rato,
tu mente se distraerá y,
cuando vuelvas a casa,
te sentirás  mejor.

Así que, elige algo ahora mismo y ¡hazlo ya!

Por último decirte que hay veces que
aunque tú lo intentes con todas tus fuerzas,
no lo consigues solo contigo o con la ayuda de tus familiares o amigos,
así que para esos momentos,
que sepas que aquí estoy para lo que necesites.

Infografía